Desde hacía un mes, Alejandro Ruiz Noriega salía cada mañana desde su casa, en la calle calle 86 con carrera 42A1, a tomar el bus en la carrera 42B para irse a su trabajo, un puesto en una prestigiosa firma de abogados de Barranquilla.

Era su primer empleo, un logro importante para un joven de 23 años que apenas se había graduado como abogado el pasado 26 de mayo, en la Universidad del Norte. Además le faltaba poco para obtener su título como especialista en derecho administrativo, la rama de su profesión por la que decidió seguir.

Ruiz Noriega, nacido en Valledupar, también habría podido seguir su pasión: el fútbol. Ferviente hincha del Fútbol Club Barcelona, de España, había jugado en las inferiores del equipo de su ciudad donde se destacó como defensa central. Sus amigos lo recuerdan como un jugador recio, rápido y con buen quite de balón.

Sin embargo, decidió perseguir su sueño de ser abogado y por eso viajó de la capital del Cesar hasta Barranquilla, en 2011. En la universidad fue un estudiante sobresaliente, llegando a ser monitor de varias materias.

Todo ese futuro fue truncado a las 6:50 de la mañana de este jueves cuando recibió un disparo en el rostro, tras forcejear con un ladrón que quería quitarle sus pertenencias.

Testigos aseguraron que el jurista iba camino a tomar el autobus cuando dos hombres a bordo de una motocicleta se le acercaron y el parrillero lo intimidó con un arma de fuego. El delincuente le exigía que le entregara el celular, un Motorola G de quinta generación, y un morral.

Ruiz Noriega se resistió a que le quitaran sus cosas, sobre todo el celular que tenía dos días de comprado. Forcejeó con el agresor y este le disparó a quemarropa, justo al lado derecho de la nariz.

El atracador tuvo tiempo de quitarle el celular, la billetera y el morral, subirse a la motocicleta y escapar, pero unos metros adelante el bolso se le cayó y lo dejaron olvidado. Mientras tanto, el joven estaba tendido en el suelo, desangrándose.

Una patrulla de la policía lo auxilió y lo trasladó hasta el Hospital Metropolitano, pero los médicos no pudieron hacer nada por salvarlo, debido a la gravedad de la herida y a la gran cantidad de sangre perdió.

La Policía Metropolitana de Barranquilla ofreció 10 millones de pesos como recompensa para la persona que suministre información que permita la captura de los homicidas.

Como parte de la investigación, las autoridades analizan las cámaras del sector y ya manejan un indicio de quiénes serían los responsables.

El atraco y homicidio se produjeron en el cuadrante delimitado por la Alcaldía y la Policía, en el que está prohibida la circulación de motocicletas con parrillero hombre.